10.4.11

Invictus

Más allá de la noche que me cubre, negra como el abismo insondable, doy gracias a los dioses que pudieran existir por mi alma invicta. En las azarosas garras de las circunstancias nunca me he lamentado ni he pestañeado. Sometido a los golpes del destino, mi cabeza está ensangrentada, pero erguida. Más allá de este lugar de cólera y lágrimas, donde yace el Horror de la Sombra, la amenaza de los años me encuentra y, me encontrará sin miedo. No importa cuán estrecho sea el portal, cuán cargada de castigos la sentencia. Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma.

1 comentario:

  1. Me encanta tu blog...siempre te leo. No pares nunca, eres simplemente genial =)

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idas de olla.